Un hombre y una mujer tenían problemas matrimoniales y decidieron poner fin a su unión después de muy poco tiempo juntos.
Tras un brevísimo intento de reconciliación, la pareja acudió a los tribunales para concretar su ruptura.
El juez preguntó al marido:
“¿Qué te ha llevado a este punto en el que no puedes mantener unido este matrimonio?”
El marido dijo: “En las seis semanas que llevamos juntos, no hemos podido ponernos de acuerdo en nada”.
La esposa dijo: “Siete semanas”.