Una pareja de ancianos visita a un médico.
El médico le dice al anciano: “Necesitaré una muestra de orina, una muestra de heces y una muestra de sangre”.
El anciano dice: “¿Qué?”
El médico se repite.
Una vez más el anciano dice: “¿qué?”
Entonces el doctor lo grita,
“¡Necesito una muestra de orina, una muestra de heces y una muestra de sangre!”
Con eso la anciana se vuelve hacia el anciano y le dice:
“¡Dijo que necesita un par de tu ropa interior!”